La minoridad franciscana: una espiritualidad para el mundo de hoy
En un mundo marcado por la competitividad, el poder, el afán de superioridad y el individualismo, la espiritualidad franciscana propone una alternativa revolucionaria: la minoridad. No se trata de un concepto marginal dentro del universo franciscano, sino de una de sus columnas vertebrales.
En un mundo marcado por la competitividad, el poder, el afán de superioridad y el individualismo, la espiritualidad franciscana propone una alternativa revolucionaria: la minoridad. No se trata de un concepto marginal dentro del universo franciscano, sino de una de sus columnas vertebrales. San Francisco de Asís no solo se reconocía a sí mismo como "el hermano menor", sino que quiso que esa fuera también la identidad de su fraternidad.
La minoridad, en la tradición franciscana, no es simplemente una actitud de humildad individual o una virtud ascética. Es una opción radical por el lugar del último, una forma concreta de situarse en el mundo desde abajo, desde la pequeñez, desde la conciencia de que todo es don. Implica renunciar voluntariamente al poder, al privilegio y al prestigio, para hacerse servidor de todos, especialmente de los más vulnerables.
Ya en la Primera Regla de vida que San Francisco entrega a sus hermanos, encontramos esta clave esencial:
“Y ningún hermano tenga poder o dominio, y menos entre sí. Antes bien, como dice el Señor: Los que son tenidos por gobernantes de las naciones las dominan... no así entre vosotros; y el que quiera ser el mayor entre vosotros, sea vuestro servidor. Y el que es el mayor entre vosotros, hágase como el menor” (1 R 5,9–13).
Con estas palabras, Francisco traslada a la vida concreta del día a día las enseñanzas evangélicas de Jesús sobre el servicio, la humildad y el amor fraterno. Ser menor no es algo que se declara, sino que se vive: es elegir siempre el lugar del que sirve, del que escucha, del que acompaña sin imponerse.
Una propuesta vigente
Esta idea, profundamente evangélica y contracultural, encuentra una resonancia actual y necesaria en la encíclica Fratelli tutti del Papa Francisco. El Santo Padre habla de la necesidad de una fraternidad que no se quede en la teoría, sino que se encarne en gestos concretos, en una cultura del encuentro, de la gratuidad, del servicio. Y en ese sentido, la minoridad franciscana es una llave espiritual para abrir caminos nuevos en medio de tantas formas de exclusión y desigualdad.
Desde la Escuela Superior de Estudios Franciscanos (ESEF), el nuevo libro que ahora presentamos ofrece una mirada profunda y actualizada sobre Fratelli tutti, desde las claves del pensamiento franciscano. En sus páginas, el lector encontrará una invitación a comprender cómo el espíritu de la minoridad puede ayudar a construir una sociedad más fraterna, más justa y más humana.
Una herramienta para la formación y la vida
Este libro no solo está pensado para especialistas o estudiosos del franciscanismo, sino también para religiosas y religiosos, agentes de pastoral, estudiantes de teología, y todas aquellas personas que buscan vivir su fe de manera comprometida con el Evangelio y con los más pobres.
Ofrece una lectura que combina fidelidad a las fuentes franciscanas con una sensibilidad contemporánea, y puede ser una excelente herramienta para grupos de estudio, retiros, formación comunitaria o reflexión personal.
En un tiempo en el que el poder y el egoísmo tienden a ocupar el centro, la espiritualidad de la minoridad nos recuerda que hay otra forma de habitar el mundo: la del hermano menor, la del que camina al lado, la del que elige el último lugar para que otros puedan levantarse.
Te invitamos a descubrir esta propuesta en profundidad con la lectura de este libro.
Está disponible ya en nuestra página web. Sigue el siguiente enlace:
https://www.capuchinoseditorial.org/libro/588/fratelli-tutti-la-conversion-desde-la-fragilidad